MAPA
RESUMEN
La relación de los seres vivos y
su ecosistema (uno de los enfoques ecológicos) plantea paradigmas sobre cómo se
define el término “Ecología” (acuñado por Ernest Haeckel). Algunos, consideran
esta ciencia como prescriptiva y predictiva, pues ha servido como herramienta
para la solución de problemas medioambientales, así como su conservación y
restauración. Otros, como Likens, proponen una concepción más pluralista,
puesto que relaciona la interacción de los organismos y su distribución.
En materia conceptual, la
ecología trabaja en la construcción de modelos interpretativos sobre el campo
de la Biología, así como su interpretación en materia terminológica (alfabetización
científica).
La ecología, a su vez, desarrolla
actitudes sobre la conservación del entorno natural y provee el fundamento para
otros campos del conocimiento biológico, trabajando no sólo en el papel
informativo.
Finalmente, se debe especificar
que al hablar de ecología, no se refiere directamente al movimiento ecológico
social (llamado comúnmente como “ambientalismo”), pues ésta es una forma de
pensamiento relacionado al entorno natural (derivado del estudio ecológico). Se
concluye, entonces, que la EA (Educación Ambiental) ha provisto de los
contenidos necesarios para reforzar a la Ecología como ciencia.
JUICIO CRÍTICO
La enseñanza en materia de
conciencia ecológica (apoyada explícitamente por esta ciencia) se hace más que
necesaria por la enorme importancia económica, social e incluso moral de los
individuos en la actualidad. Se debe discutir sobre lo que no puede dejar de
enseñarse y tenerse en cuenta para hacerlo, combinando modelos didácticos (y
dicho sea de paso, efectivos) que delimiten el campo de estudio y de acción. De
esta manera, podremos tener un enfoque actualizado de lo que ecología se
refiere, además de interactuar con la problemática medioambiental de los
últimos años.
Muchas veces, cuando se estudian
contenidos ambientales en materias como Biología, Ecología o Ciencias
Naturales, incluso bajo un enfoque ambiental, no suelen trabajarse conceptos,
principios y procedimientos ecológicos. No se alcanza el grado de
concientización adecuado que sí se esperaría si se profundizara, no sólo
conceptual, sino semántica, entendida como el nivel de captación acerca de la relación medio ambiente –
organismos vivos y su posterior aplicación en la realidad, tanto en su
problemática como en la prevención de problemas futuros.
FUNDAMENTACIÓN
La Educación Ambiental y la
Ecología como ciencia. Una discusión necesaria para la enseñanza
La Ecología
como ciencia: una conceptualización necesaria
La palabra “ecología”, fue
utilizada por primera vez por Ernest Haeckel Wen (1869) para describir el
estudio científico de las interacciones entre los organismos y su medio
ambiente.
La Ecología se ha debatido entre
varias líneas de pensamiento o paradigmas (Picket et al., 1994). Una, que
podemos asociar a los planteamientos de la demografía (Terradas, 2001). Otra
con claro enfoque hacia las relaciones funcionales que se dan ente los seres
vivos, y en un intento de abordar tanto las comunidades como los ecosistemas.
Begon et al. (1988) menciona que
esta ciencia adopta metodologías y construcciones teóricas particulares de
acuerdo al nivel de organización que se trate.
La rama más joven de la ecología,
es la ecología del paisaje. Sus orígenes se remontan al siglo XX, donde se
desarrollan métodos y teorías propios. Esta disciplina se ocupa de las
interrelaciones entre la sociedad y los paisajes abiertos –naturales y rurales-
y construidos –urbanos. Sirve de herramienta para la solución de problemas de
planeamiento, manejo, conservación y restauración (Matteucci, 1994), por lo que
resulta una ciencia prescriptiva y predictiva (Naveh y Lieberman, 1994).
Likens (1992) propone adoptar una
concepción más pluralista y abarcadora, entendiendo a la ecología como el
estudio científico de los procesos que influyen en la distribución y abundancia
de los organismos, las interacciones entre ellos y las interacciones entre los
organismos y la transformación y los flujos de la materia y de la energía.
Como ciencia empírica, la
ecología debe lidiar con el carácter provisional de sus hipótesis en el ámbito
tanto educativo como científico (Gonzáles del Solar y Marone, 2001).
Terradas (2001) y Pisanty (2003)
recuentan, de algún modo, cuáles son las ideas dominantes en el presente sobre
las comunidades y ecosistemas, teniendo en cuenta cuáles son los constructos
que van perdiendo sustento epistemológico.
Varios comités de ecólogos
(Ecological Society of America, 1996; National Research Council, 1986), en un
intento de resaltar los conceptos disciplinares más relevantes, han elaborado
listas de las características de los sistemas ecológicos que son
particularmente importantes para tener en cuenta cuando se trata de entender y
mitigar sus respuestas a las perturbaciones. Estas especificaciones son las que
los administradores y ciudadanos deberían conocer para realizar fundamentadas
recomendaciones en cuestiones de manejo.
Actualmente el concepto de
biodiversidad es lo suficientemente abarcador como para incluir todos los
niveles de organización biológica. La definición más difundida es la incluida
en la Convención sobre la Diversidad Biológica, según la cual es “la
variabilidad de organismos vivos de cualquier fuente, incluidos, entre otros,
los ecosistemas terrestres y marinos y otros ecosistemas acuáticos y los
complejos ecológicos de los que forman parte; comprende la diversidad dentro de
cada especie, entre las especies y de los ecosistemas”
La Ecología
en el currículum formal
De acuerdo con el enfoque de
alfabetización científico-biológico, que ha de ser el predominante en la educación
escolar obligatoria, son prioritarios los objetivos de enseñanza (desarrollo de
capacidades e instrumentos cognitivos, afectivos, necesarios para que el alumno
comprenda y de ese modo actuar ante las problemáticas socio-ambientales).
En los aprendizajes conceptuales,
existe la necesidad de la construcción de modelos interpretativos sobre los
principales campos conceptuales de la biología.
En los aprendizajes
procedimentales, se destaca la importancia en la alfabetización científico biológica (comunicación y toma de
decisiones personales y colectivas; interacción cognitiva de la persona con la
naturaleza; elaboración y transformación de la información y formulación de
problemas, etc.).
En cuanto a las actitudes, se
fomenta una aproximación sucesiva a las actitudes científicas y específicamente,
interés por la conservación del entorno natural, los ecosistemas y la
biodiversidad; solidaridad con los demás seres vivos y protección de otra
formas de vida.
McComas (2002) afirma que en las
últimas cuatro décadas, la Ecología ha encontrado su lugar en el currículum de
las ciencias de la vida entre otros más nuevos campos científicos como la
Biología Molecular. Sostiene que la Ecología permite a los estudiantes aplicar
y sintetizar mucho más que otras disciplinas de la Biología y, en este sentido,
se asemeja a la evolución debido a que no sólo informa sino que a la vez provee
el fundamento para otros campos del conocimiento biológico.
El enfoque
ambiental y el papel que desempeña la Ecología.
Cuando se habla de Ecología, se
utilizan do significados del término: como movimiento social (ecologismo), o
como disciplina biológica (la ecología ciencia). Acot (1990) distingue entre
“ecología” como conocimiento ecológico y el “saber ecológico social” como
conocimiento ecológico presente en el
conocimiento cotidiano y en las prácticas sociales.
Elchier y Faundes (2004) agregan
que el movimiento ecológico social, denominado “ambientalismo” es considerado
como el conjunto de cualidades y comportamientos característicos de una
doctrina o de una escuela de pensamiento acerca de temas relacionados con el
medio ambiente natural. Pero que, sin embargo este movimiento no siempre tuvo
presentes los conocimientos científicos.
En este contexto, la Educacion
Ambiental (EA) está vista como una concienciación ambiental creciente entre las
poblaciones humanas como fuente de conocimiento, valores, actitudes y
capacidades necesarias para proteger el ambiente.
Como señalan Giordan y Souchon
(1991), el enfoque ambiental tiene como objetivo formar una población mundial
consciente y preocupada por el ambiente y sus problemas, que posea
conocimientos, competencias y motivaciones que le permitan trabajar individual
y colectivamente en resolver problemas actuales y evitar que se planteen otros
nuevos.
Las estrategias para definir los
contenidos de la EA han sido variadas y, particularmente muy disputadas cuando
se han abordado en el marco del currículo de la educación formal.
Desde los inicios de la EA hay un debate abierto acerca de si las
ciencias constituyen el vehículo más adecuado para introducirla. Esto se debe
al fuerte componente científico que puede tener el tratamiento de temas
medioambientales en la escuela. Aunque esto no debe llevar a penar que la EA
sólo tiene relación con las ciencias naturales, no cabe duda de que éstas,
acordando con lo señalado por Greenall Cough (1992), pueden desempeñar un papel
más que privilegiado de ellas.
La experiencia indica que la
ecología sistemáticamente ha llenado los supuestos contenidos de la EA y es
incuestionable en la construcción de los mismos. Foladori señala que esta
ciencia ha alcanzado una posición hegemónica al aportar, al menos, elementos de
importancia como el pensamiento de términos de “ciclo de vida”, donde se
reconocen los flujos e interrelaciones de materia y energía entre todos los
factores de un ecosistema, y el tratamiento con elementos y relaciones que
pueden ser cuantificables por procesos físicos y químicos.
Las
concepciones alternativas de temáticas ecológicas
La escuela tradicional presenta
muchas veces las nociones ecológicas como un conjunto e dogmas cuando los
alumnos estudian el ecosistema o las relaciones ecológicas como conceptos
cerrados, estáticos, con una única formulación posible.
Sin embargo, la enseñanza de la
Ecología es significativamente más amplia, por lo que nuevas líneas de
investigación están comenzando a señalar la importancia de generar una
comprensión profunda de otros conceptos, procedimientos y actitudes que
relacionen la ciencia, la tecnología y la sociedad.
Algunas dificultades para el
aprendizaje de temáticas ecológicas que hemos recopilado de la bibliografía
existente y que hemos encontrado en estudios previos. Las mismas refieren
temáticas estructurantes como son las nociones de sistema, cambio, organización
y diversidad; particularmente los conceptos de ecosistemas, estabilidad y red
trófica, perturbación, contaminación y diversidad biológica.
Conviene destacar que la
biodiversidad resulta de especial interés ya que se ha convertido en un
vehículo para unir aspectos biológicos con los socioculturales. Sin embargo,
existen numerosos impedimentos para que adquiera significado para los
estudiantes.
La simplificación conceptual, la
escasa profundidad en el tratamiento de este contenido, la falta de
actualización, y su presencia en los medios masivos de comunicación han
determinado que se asocie la biodiversidad sólo con la diversidad de especies,
sin considerar los distintos niveles de organización, para lo que es válido
este concepto.
Bright y Stinchfield (2005),
concluyeron que, como las definiciones técnicas y científicas pueden variar, se
generen confusiones entre la comunidad científica, los administradores y el
ciudadano.
Discusión
La Ecología otorga a los
problemas ambientales un ámbito de validez científica, y que ofrece
conocimientos y metodologías eruditas para su descripción, solución, predicción
y control. Es por ello que en la EA deberían abordarse problemáticas con una
aproximación ecológica, al menos en espacios curriculares como Biología,
Ecología, o Problemática Ambiental, lo
que no necesariamente excluye su tratamiento desde otras ciencias.
La Ecología aporta elementos
fundamentales al debate social como una visión biocéntrica que ayuda a superar
el antropocentrismo tan extendido en nuestra cultura (García, 2002), no basta
con reconocer, por ejemplo, la existencia del problema del efecto invernadero y
entender las causas sociales de lo que sucede; pues hay que entender también
los procesos ecológicos subyacentes.
Por ello es necesario que las
personas no sólo posean “conciencia ecológica” sino también “conocimiento
ecológico”. Sólo de esa forma se logrará generar el cambio.
CONCLUSIONES
-
La ecología, entendida por dos líneas de
pensamiento, puede referirse a la demografía o a la relación del ser vivo y su
ecosistema. Vemos que ambos enfoques desarrollan una concepción más profunda de
la ecología (más semántica y a la vez conceptual).
-
La conservación del entorno natural es, en
esencia, la naturaleza de las actitudes de la ecología, que desarrolla y provee
el fundamento necesario para los campos del conocimiento de la Biología y
ciencias afines.
-
Se distinguen dos significados del término
ecología. El primer término, referido
al conocimiento ecológico (conceptual, semántico, etc.) y el segundo, al “saber
ecológico”, originado por la interacción de la sociedad y el conocimiento
ecológico.
-
De lo anterior, se origina el movimiento
“ambientalista” y su forma de pensamiento relacionado al ambiente natural, su
cuidado, protección y a la prevención de amenazas contra la integridad
medioambiental.
-
La “biodiversidad” es un concepto que une los
aspectos biológicos (saberes, ciencia) y los socioculturales. Involucra la
relación ciencia-tecnología-sociedad en un vínculo indivisible para su
desarrollo.
REFERECIAS
ANEXOS
ANEXO 1
La ecología es muchas veces
confundida con la forma de pensamiento que indica que “el desarrollo de una
nación involucra el cuidado y protección del medio ambiente, dando lugar al
llamado desarrollo sostenible”.
ANEXO 2
Aunque suene descabellado, la
propuesta del movimiento “ambientalista” sobre la destrucción de los medios
naturales no está lejos de la realidad, sobre todo si analizamos los
acontecimientos de los últimos 10 años.
ANEXO 3
La ecología debe servir como
herramienta para la aplicación de políticas y programas para la conservación de
la naturaleza. Para ello, es necesario implementar la Educación Ambiental.
ANEXO 4
Se deben sentar las bases
necesarias para el desarrollo de la Ecología, en pro del “pensamiento
ambientalista”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario